Zapatero debería estudiar el modelo chino, que se basa en el esfuerzo, y aplicarlo en España para salir de la crisis como un cohete, aunque eso parece un sueño porque nada está más lejos del planeta de Zapatero y de los valores que promueve. Mientras que él ha destruído el tejido productivo de la nación, ha generado desempleo y pobreza y ha impulsado una sociedad española sin esfuerzo, valores ni raices, los chinos extraen del pasado la energía del presente, respetan las tradiciones, trabajan sin descanso, adoran el espíritu emprendedor, construyen y cuidan con primor el tejido productivo y no entienden un mundo que no este dominado por la responsabilidad y el tesón.
Llegaron a España con humildad, sin crear problemas e integrándose razonablemente. Primero abrieron restaurantes de comida china y después abrieron tiendas especializadas en productos "made in China", pero hoy, tras descubrir que en España los que se esfuerzan prosperan, están invadiendo nuevos territorios, desplazando a los españoles en restaurantes de comida tradicional, bares, cafeterías supermercados y hasta incursionan en grandes almacenes.
Su secreto es trabajar más que los demás y conformarse con menos margen de beneficio. Con esa receta, son imbatibles y, si los españoles no reaccionan, terminarán copando el mercado y creando una nueva y pujante prosperidad en este país medio arruinado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario