Un estudio hecho en los países nórdicos , demostró que las personas que invierten en bolsa no son los que más dinero tienen, sino lo más inteligentes.

"Por extraño y paradójico que le parezca: La renta variable es el activo-a largo plazo-más rentable y menos arriesgado".Francisco García Paramés

La clave en el mundo de las inversiones está en la PACIENCIA, como decía un inversor value "Más vale hacerse rico despacio que pobre rápidamente" .

Todo llega para quien sabe esperar.Nunca te des por vencido, las grandes cosas llevan tiempo.

‎ "Yo me fío más de cómo maneja la economía una familia que se juega el pan o un empresario, que se juega la ruina, que un grupo de señores que, cuando quiebran un país, se van a su casa, reciben seis cargos públicos o privados y se dedican a dar discursos."Daniel Lacalle

Los seres humanos observan que hoy en día las carreteras, los hospitales, las escuelas, el orden público, etc. etc., son proporcionados en gran (sino en exclusiva) medida por el estado, y como son muy necesarios, concluyen sin más análisis que el estado es también imprescindible. No se dan cuenta de que los recursos citados pueden producirse con mucha más calidad y de forma más eficiente, barata, y conforme con las cambiantes y variadas necesidades de cada persona, a travésdel orden espontáneo del mercado, la creatividad empresarial y la propiedad privada.Jesús Huerta de Soto

Comprar cuando la bolsa baja y vender cuando sube es difícil porque va en contra de la naturaleza humana: en los últimos 3.000 años, cuando el vecino de al lado salía corriendo o gritaba "fuego", ha resultado rentable salir corriendo también. De ahí que cuando la bolsa sube nos dan ganas de comprar, y cuando baja nos dan ganas de vender, por una simple cuestión de biología.

¿Pero es que no os dais cuenta que todas las injusticias y toda la corrupción proviene de lo "publico"?‏



sábado, 9 de agosto de 2008

Camino hacia la independencia financiera

A continuación dejaré un resumen de la Sociedad de Propietarios que pretende ser una alternativa al hipertrofiado Estado de Bienestar http://www.juandemariana.org/pdf/061116 … tarios.pdf

Segun Abraham Maslow, los individuos anhelan una búsqueda continua de superación, lo que simplificaríamos como la escalada de una montaña. Cada vez que alcanzamos y superamos un escollo, nos asentamos sobre ese nivel y, cuando lo tenemos bajo nuestro control, nos enfrentamos a la siguiente dificultad. Maslow lo expresaría gráficamente a través de una pirámide, la cual refleja dos ideas fundamentales: la superación y consolidación de los distintos niveles de necesidades y la jerarquía que existe entre estos. En palabras del propio autor, los niveles o etapas quedarían explicados como sigue: "existen al menos cinco tipos de fines, que podemos llamar necesidades básicas. Brevemente, estas son las fisiológicas, de seguridad, relación, estima y autorrealización".


La importancia de estas conclusiones es vital si tenemos en cuenta que en la actualidad, en los países occidentales, las necesidades más básicas, las fisiológicas (alimento, vestido, salud o cobijo), están en general superadas y totalmente asimiladas, y las personas buscan alcanzar y quemar etapas más elevadas. Emergen con mucha más fuerza necesidades de seguridad, como la protección física y económica frente a cualquier contratiempo, que, pese a que por lo general también están bastante asimiladas, pueden llegar a resentirse notablemente en momentos de crisis política, económica y social .En el terreno del afecto y de las relaciones sociales, los individuos se suelen quejar por la dificultad de compatibilizar el trabajo con la familia y el cuidado de los hijos, o la disponibilidad de cada vez menos tiempo de ocio. En cuanto al reconocimiento o a la falta de "autorrealización", muchos son los individuos que se hallan afligidos por la arbitrariedad directiva o la falta de desarrollo personal en trabajos que estiman alienantes.

Lo que se trata es de reforzar el abastecimiento de recursos financieros en el hogar para lograr independencia y seguridad financieras sólidas, gracias a las cuales no deberemos estar al amparo de terceras personas.
La seguridad económica no debe confundirse con disponer de una única renta del trabajo constante, proveniente de un empleador exclusivo, ya sea una empresa privada o el estado (seguridad laboral). Hablamos de acumular e invertir en el tiempo (cuanto antes, mejor) para obtener en el futuro rentas patrimoniales (independientes) que nos produzcan una mayor autonomía económica y de decisión. Si estamos supeditados o atados al sueldo de un único empleador, conminados por el temor a la quiebra de la Seguridad Social en un futuro no muy lejano, si peligran nuestras pensiones, los servicios públicos cada vez son más deficientes y hemos de procurárnoslos de manera alternativa, si no estamos desarrollando una actividad laboral que nos satisfaga y nos motive emocional y profesionalmente, estaremos siendo una estafa para nosotros mismos y la empresa para la que trabajamos; si la vida familiar se resiente por falta de tiempo, o por falta de reconocimiento en nuestro trabajo, o por falta de dinero, nuestra satisfacción personal y del hogar será nula.


La socialdemocracia o el estado de bienestar ha resultado ser un verdadero fracaso en su intento de proveer cualquiera de las necesidades que se hallan en los escalafones más altos que nos explica Maslow. Es más, el Estado no es una empresa que esté dando mal un servicio a unos ingenuos consumidores que lo sufragan y deciden prescindir de éste por su falta de capacidad. Del Estado no existe forma de huir. El Estado es un ente irresponsable que no rinde cuentas ante los contribuyentes, como lo haría una empresa. El Estado existe, sobre todo, para justificarse a sí mismo; y qué mejor que los presupuestos públicos, obtenidos mediante la coacción, para alcanzar tal fin.

Además la actuación reguladora e intervencionista en la economía de los poderes públicos genera efectos demoledores sobre la capacidad creativa y empresarial de los individuos, tanto de empleadores como trabajadores por cuenta ajena o propia (autónomos). Las peor paradas acaban siendo las clases medias, y más aún, los trabajadores por cuenta ajena, que disponen de poca o nula capacidad material para poder escapar de las garras recaudadoras de las administraciones públicas ni, si fuera su intención, para sortear los obstáculos que existen para la creación empresarial.Como muestra algunos casos flagrantes en que el Estado carga sus tintas contra la clase media. La progresividad del IRPF, que supone un freno a la movilidad social de los ciudadanos, y penaliza a las familias en las que sólo trabaja un miembro. Los elevados tipos marginales, en algunas regiones o ciudades españolas, son especialmente gravosos para unos salarios medios que, si bien son aparentemente superiores, se enfrentan a unos niveles de vida mucho más caros. El terrible sistema impositivo español sobre le patrimonio, sucesiones y donaciones, ganancias patrimoniales o rentas del capital convierte a España en uno de los sistemas más opresivos de la OCDE.

En cuanto a la deficiencia de los servicios que asume el Estado y las correspondientes necesidades que pretende cubrir, se hace especial hincapié en el asunto de las pensiones. Las pensiones tienen una trascendencia enorme en el contenido del informe por una doble vía. En primer lugar, la constatación de la estafa que suponen y el débil hilo que sustenta este entramado piramidal, y, por otro lado, su relación con el propio tema del informe:como medio de obtener rentas vitalicias no dependientes del trabajo. El sistema de reparto está abocado a la quiebra como consecuencia del envejecimiento de la población, así como se recurre a la misma regulación mercantil (23.2 LOCM:) para poner sobre la mesa la propia naturaleza próxima a la estafa que representa el sistema de pensiones: "se prohíbe proponer la obtención de adhesiones o inscripciones con la esperanza de obtener un beneficio económico relacionado con la progresión geométrica del número de personas reclutadas o inscritas.

La Sociedad de Propietarios consiste en que el individuo constituye su patrimonio ahorrando e inviertiendo en activos, es un mecanismo ideal para que, por medio de activos reales (viviendas, locales, garajes…) o financieros (acciones, fondos de inversión u obligaciones), el individuo pueda obtener rentas vitalicias adicionales incluso superiores a la máxima aportada por el sistema de pensiones actual".


Con el, se pretende dar más autonomía, responsabilidad y libertad al individuo con el fin de que éste pueda ir satisfaciendo sus necesidades crecientes sin verse sometido a todas las cortapisas que hoy padece, como la dependencia financiera de un único sueldo, las trabas burocráticas al libre desarrollo de la creatividad individual, el padecimiento de un sistema público de pensiones abocado al desastre, o de un ineludible sistema educativo que conduce a los jóvenes a una miasma colectivista.

A pesar de la fuerte intervención estatal, las sociedades occidentales han sido capaces de llevar la creación capitalista a tal extremo que, hoy día, hasta los más recalcitrantes sentirían vergüenza si negaran cuáles son los triunfos obtenidos por el entramado empresarial y social: La gran y variada oferta en el mercado de bienes es arrolladoramente abundante; estos cada vez son más innovadores y relativamente más baratos con relación a los salarios. Como trabajadores, las condiciones laborales mejoran sustancialmente en aquellos países donde se deja al mercado actuar con más libertad: la productividad del trabajador aumenta, lo hacen los salarios, los trabajos son más cualificados en detrimento de los manuales, en el largo plazo se reduce la jornada laboral, aumenta el ocio... Especialmente visible esta drástica mejora en aquellos grupos humanos que emigran a los países más desarrollados. Existe un tercer punto reseñable sobre la forma en que se benefician los individuos del capitalismo, y que nos engancha con la mencionada cultura financiera: la participación de la ganancia capitalista, es decir, de la creación empresarial y del éxito que estas compañías puedan alcanzar en el desarrollo de su actividad económica, por parte de la población general. Este último punto es el que menos ampliamente está comprendido por los componentes de la sociedad e, incluso, por aquellos que defienden las bondades del capitalismo. En definitiva, tres figuras "muy humanas" son las grandes beneficiadas: el consumidor, el empleado y el accionista (entiéndase esto último de una manera amplia).

La cultura e inteligencia financieras son vitales si se tiene la ambición de obtener mayor independencia, seguridad o libertad económica. Estas habilidades adquiridas capacitan a los hombres para poder prescindir de forma creciente de la intervención de agentes externos para su propia subsistencia o mejora de bienestar, lo que se consigue por medio de la continua acumulación de patrimonio y la generación de rentas pasivas del capital invertido.Una actitud financiera se estima más inteligente cuando se analizan los objetivos a medio y largo plazo que se quieren fijar para un proyecto y se comienza a predisponer la mente hacia su obtención. Si deseamos una seguridad económica no atada a un único salario, si deseamos retirarnos a una edad más temprana que la que nos fijan los estados, si anhelamos desarrollar actividades profesionales que nos satisfagan o emprender nuevas aventuras empresariales, si queremos más tiempo para pasar con nuestra familia, si buscamos la mejor educación para los hijos, etc., seguramente debamos acometer cambios en nuestras vidas, en cómo llevamos nuestras finanzas familiares.

Grosso modo, se recomienda realizar un análisis de la situación económica presente para poder establecer metas más realistas a medio/largo plazo. Cuál es el punto de partida: fuente de obtención de nuestros recursos, aplicación de los mismos. Si ya sabemos "qué queremos ser" y dónde estamos, se dará comienzo a un plan o presupuesto financiero en el que se pongan hitos, metas y evolución del mismo, se estudiarán las expectativas de ingresos y gastos futuros, etc. Esta planificación debe realizarse paso a paso y de forma realista.

1.Cortar las deudas

En primer lugar, hay que contar con una fuente de ingresos y un control de gastos que nos permitan llegar sin dificultades a fin de mes (sueldo por cuenta ajena, propia, en la mayoría de los casos). Las deudas prescindibles, si las hubiere, se deberán suprimir.
Pero siguamos por donde ibamos, no tendría ninguna lógica retirar una porción de lo recursos percibidos para ahorrarlos e invertirlos a un 7% anual en la Bolsa cuando existen aún deudas pendientes, por ejemplo, derivadas del abuso de una tarjeta de crédito revolvente con la que se aplaza el pago de las compras a una tasa de interés anual del 16%. Como se observa, la tasa pagada por el crédito es muy superior a la devengada.

Comienza el ahorro

De manera que cuando hayan desaparecido las deudas más banales, el siguiente paso es empezar un plan regular de ahorro. El plan de ahorro se diferencia claramente de los simples ahorros familiares que son resultado de lo que "nos sobra este mes de nuestro sueldo". Debe existir una planificación de gastos, previsión de ingresos y seguimiento del presupuesto. Este dinero ahorrado, sin embargo, debe cumplir la condición de que esté libre de obligaciones (alimento, cobijo, etc.).

Ya se que me direis que como vamos ahorrar si apena llegamos a fin de mes pero sabeis ¿quien es el principal culpable de nuestra falta de ahorro? las Administraciones Públicas y nuestra baja formación financiera. Si como lo estas escuchando,hoy dia mas del 40% de las rentas de los trabajadores se lo lleva las numerosas Administraciones públicas que hace un despilfarro de gasto brutal y por tanto la capacidad de ahorro se ha visto reducida muy drasticamente por las politicas sociales de los partidos intervencionistas que se sufragan de subidas de impuestos,que sirva un dato como ejemplo en 1981 un español medio pagaba un 13,81% de impuestos en 2007 pagamos un 37,5% ¿ como quieren que ahorremos? la verdad es que los politicos no quiere que ahorremos, pues quieren que hagamos valer nuestro progreso de sus nefastas politicas electorales, cada vez que escucho mas gasto publico y mas politicas sociales recordad que pagaremos mas impuesto las clases medias. Dejarme deciros que la mejor politica social es menos intervencionismo, menos gasto publico, menos impuestos, en definitiva menos Papa Estado.Y lo curioso es que el sistema actual lo sustenta la clase media y media-alta pues los altos patrimonios pagan menos impuestos pues a ellos los politicos le han concedido el privilegio de pagar un 1% solo por las ganancias de patrimoniales ( Con las sicavs: que curioso que Emilio Botin y Amancio Ortega page menos impuestos que un trabajador medio)mientras nosotros hasta 2006 pagabamos un 15% y el Gobierno de Presidente Zapatero nos subio al 18% en 2007 dando otro gran golpe los poquitos ahorros de las clases medias y no siendo descartable que en un futuro lo suban al 25% lo que haria de todo inviable el ahorro e inversión para nuestra desgracia.)


La magia de la capitalización compuesta gravita en su capacidad de multiplicar el capital en progresión geométrica. España, desde su integración en la Unión Europea en 1986 hasta 2005, ha conseguido una revalorización media anual del 16,4% en la Bolsa de Madrid. La inflación media durante esos años fue del 5,3%. Un fondo de inversión que replicara esta tendencia habría obtenido, en términos reales, una remuneración del 11,4%. (Estos porcentajes son similares, en algunos casos algo inferiores, en los países avanzados). Si nos detenemos a emplear la fórmula que calcula el valor final de una renta (compuesta) constante (C) a un tipo de interés real fijo (i) durante n años [C.((1 + i)n – 1) / i], observaremos que con el paso del tiempo (n) las ganancias son muy superiores a las que se derivarían de una progresión lineal (una línea recta). Esto se debe a que si nosotros realizamos una aportación anual de 1 euro en un fondo de inversión con una revalorización media del 10% nominal durante varios años, estaremos acumulando las ganancias cada año y estas se sumarán a las propias aportaciones periódicas. Si yo aporto ese euro el primer año, al final del mismo obtendré 1,1 euros; este monto se suma al siguiente euro que invierto, teniendo a principios del segundo año, 2,1 euros. Al final de dicho periodo, dispondré de lo mismo más el 10% de dicha cantidad. En definitiva, se trata de una progresión geométrica que presenta una expresión como la que vemos más arriba.

Esto nos revela otra gran máxima. Cuanto antes comencemos mejor. Aparte de por una cuestión de actitud –los hábitos se adquieren mejor cuando somos jóvenes–
porque este aspecto resulta clave si queremos disponer de rentas pasivas cuantiosas e incluso a edades tempranas. La obtención de rentas vitalicias, aquellas que se generan de forma autónoma, es el gran acicate de la sociedad de propietarios.

La inversion en bolsa y a largo plazo la historia ha demostrado es el lugar mas lucrativo para tener el dinero y con mayor rentabilidad.
Un ejemplo mire este gráfico nos muestra 75 años de Inversión en acciones (renta variable) , en bonos u obligaciones (renta fija) y en mercado monetario, frente a la evolución de los precios (la inflación)hasta el año 2000:




Demuestra que la renta variable ha tenido, a largo plazo, un crecimiento superior al resto de activos. Con una línea de ascensión estable a largo plazo. Y si te fijas con detenimiento, verás que LOS CRACKs DEL 29 Y DEL 87 NO PARECEN MAS QUE GOTAS EN EL OCÉANO.
Si en 1925 hubiéramos invertido 1 dólar en el mercado monetario, ahora (abril de 2001) tendríamos 21 dólares. Si la misma inversión la hubiéramos hecho en renta fija tendríamos 48 dólares, y si hubiéramos invertido en renta variable ahora tendríamos 2.757 dólares. ¡UNA DIFERENCIA DEMASIADO IMPORTANTE PARA IGNORARLA!.

Para ilustrar las cuantías que nos puede ofrecer un escenario medio, ni demasiado optimista ni pesimista, vamos a simular qué podría alcanzar un trabajador que empiece con el hábito de ahorro e inversión a una edad temprana, a los 25 años, y que separe anualmente 6.000 euros (1 millón de pesetas) durante los siguientes 20 años con el fin de invertirlos. Si su inversión capitaliza a un 10% nominal (este porcentaje es algo inferior a la revalorización de la bolsa de Madrid de los últimos 20 años), dispondrá de un patrimonio de 57,3 millones de ptas. con 45 años, lo que, ajustado a un 3% de inflación anual promedio, se quedaría en unos 41 millones de las pesetas actuales.




Si a partir de los 45 años ya no pudiera o quisiera apartar más ahorro anual debido, por ejemplo, a responsabilidades familiares, esos 41 millones se convertirían, en los siguientes 10 años, capitalizados también al 10% nominal anual, en 148,5 millones de pesetas corrientes, que serían 80,7 millones de pesetas con un poder adquisitivo como el actual. Con ello, a partir de los 55 años de edad, este individuo podría empezar a percibir una renta pasiva de 5,6 millones en términos reales al año para su consumo, lo que se obtiene como rédito del 7% anual de todo su capital acumulado. Recordemos que este ejemplo está realizado con una hipótesis realista–conservadora de un 10% nominal de rendimiento anual de las inversiones. Sin necesidad de gran especialización. ( si usted se especializa con mas formacion financiera esas rentabilidades se apreciarian considerablemente)

Si los impuestos y las regulaciones no fueran tan gravosos, disminuirían las trabas a la creatividad individual, podríamos mejorar socialmente con más facilidad, disfrutaríamos de más ahorro nacional, más productividad y crecimiento económico y empresarial, lo que redundaría en beneficio de los individuos, ya sea como empresarios, empleados, accionistas o inversionistas y consumidores.Es por ello que incluyo un número de propuestas de reforma que sin ánimo de ser exhaustivo incluirían:

1.Eliminación de los requerimientos y regulaciones incapacitantes (licencias, permisos, informes asignados a burócratas con claro sesgo anti-crecimiento como los estudios obligatorios de impacto medioambiente, prohibiciones y monopolios...) en la puesta en marcha y funcionamiento de empresas y procesos productivos.

Y es que la legislación, además de prolija, puede ser caprichosa hasta llegar a hacer prácticamente imposible la producción en un determinado sector. Además, los distintos gravámenes por actividad económica condicionan los sectores en que los individuos comienzan a desarrollar su actividad. El estudio de la normativa o el asesoramiento de los expertos cuesta tiempo y dinero (proporcionalmente más para las empresas pequeñas que no pueden diluir el coste entre un gran volumen de producción).

2.Reforma del IRPF eliminando los tramos que desincentivan la movilidad social, dejando un único tipo de en torno al 12%, fijando un mínimo exento.

3.Eliminación del impuesto a las ganancias patrimoniales generadas en más de un año en su totalidad o, al menos, la completa exención del mismo en caso de que las compras de activos superen a las ventas del periodo. De esta forma, se homogeneizaría el tratamiento del que gozan las herramientas de inversión de los grandes patrimonios –sicavs– o los propios fondos de inversión colectiva pudiendo ser el pequeño accionista el que se beneficiara de formar su propia cartera pudiendo ahorrar hasta un 2,5% en comisiones.

4.Eliminación del Impuesto sobres Sucesiones y Donaciones (el ISD) entre familiares directos

5.Eliminación del Impuesto sobre el Patrimonio o al menos exención del 100% de ambos impuestos para los casos en que la base imponible sea inferior a los 2 millones de euros.

Por una parte, si bien es cierto que la Bolsa de valores, los inmuebles y otros instrumentos de inversión están sujetos a los vaivenes del mercado, el hecho de periodificar sistemáticamente la inversión durante un número grande de años amortigua dichos vaivenes –se compra barato, caro y normal– quedando como resultado final de la revalorización el crecimiento real de la economía puesto de manifiesto a través de los activos y rendimientos de las empresas. Por otro lado, criticar lo azaroso del crecimiento capitalista para defender el sistema público de pensiones o servicios sociales es ignorar que toda la financiación de estos últimos procede de aquel. Si la economía llegase a entrar en dicha grave recesión de larga duración, el sistema público se enfrentaría a un número muy elevado de desempleados y pensionistas sin la suficiente recaudación fiscal y con su capacidad de endeudamiento agotada. No se trata pues de elegir entre crecimiento económico o redistribución, sino en decidir si hacemos posible que florezca el primero o seguimos poniéndole cortapisas.

Tampoco es cierto que este sistema de inversion sea bueno tan sólo para las clases medias, pero perjudicial para los más menesterosos. Este comportamiento financiero extendido a una buena parte de la población, correspondiente con la clase media y alta (un 60 o 70%), beneficiará a aquellos colectivos que aún no están en disposición de apartar montos cercanos a los 6.000 o 12.000 euros por familia y año. Los hábitos de ahorro, eliminación de gastos más triviales y de planificación y fijación de objetivos de las finanzas personales serán de gran ayuda para que, aun no llegando a una renta vitalicia muy elevada, su nivel de independencia sí se vea acrecentado con las inversiones realizadas. Asimismo, un incremento en la inversión de las familias medias implica más capital privado en la economía, lo que unido a la eliminación de barreras legislativas que debilitan la creación de empresas y contratación de nuevos empleados, así como la disminución o eliminación de impuestos que penalizan el ahorro familiar y las rentas del trabajo, elevarán la renta procedente del trabajo también para aquellos con ingresos más bajos, por un lado, por mejoras salariales y por menos voracidad impositiva. En la misma o siguiente generación, estos podrían sumarse plenamente al carro de este sistema de inversion.
En este sistema se defiende una redefinición del ámbito legítimo de actuación del estado de bienestar al plantearse la problemática de los desamparados (aspecto que siempre es motivo de ansiedades entre la gran mayoría de la población). Es aquí entra en juego el principio de subsidiariedad del Estado. Tal esfera de actuación quedaría pues circunscrita a aquellos casos de incapacidad que, fruto del azar o la mala suerte, no queden totalmente cubiertos por el propio trabajo del ciudadano o la acumulación de capital (apoyo familiar, herencia, inversiones anteriores, etc).

No hay comentarios: